El Haiku: Toda verdad pasa por tres etapas… (Schopenhauer)

Schopenhauer nos acompaña hoy en el Haiku. Schopenhauer nos acompaña con una frase que deben tener clara todos los innovadores e innovadoras, sobre todo, en los momentos de fricción, de roce, de lucha por sus ideas. Y es que toda verdad pasa por tres etapas.

Si lo piensas detenidamente y te paras a recordar los casos que has vivido donde se cumplen las tres fases indicadas por Schopenhauer, te darás cuentas que se dan en todos los casos de innovación.

Primero se ridiculiza: eso es una estupidez, es una tontería, vaya patochada, que absurdo, para qué pierdes el tiempo. La gente lo toma como la acción de un loco, como la creación de una loca, como algo desdeñable.

Pero rápidamente se pasa a la segunda etapa: se oponen a ella violentamente. La gente ya ve que la idea no es una locura, que tiene razón de ser y ahora ve las implicaciones que tiene sobre ellos, como les va a CAMBIAR y se oponen a ella, luchan, pelean, sacan toda la artillería en contra de esa ridiculez que se ha materializado en algo con sentido.

Y llegamos a la tercera etapa: ¿No te dije desde el principio que era una gran idea? ¡Qué si hombre, que sí mujer, es que no te acuerdas! ¿Qué yo dije que era una tontería? Anda si era el único que te defendí siempre.

Es la aceptación total y absoluta. Parece casi salida de un viejo consejo: “Si no puedes vencerlos únete a ellos” y con esto se cierra el círculo. Rápido parece y claro, pero cuantas ideas geniales se habrán quedado por el camino.

Muchas.

Ahora a defender tus ideas que no las detenga nadie.