El Haiku: No hay hombres cultos sino hombres que…

Muchas veces confundimos una actitud y una acción con un hecho per se. Me refiero a que confundimos algo que exige un proceso contínuo de acción a algo que es así por naturaleza y en ese sentido viene muy a cuento la frase de Ferdinand Foch.

En la frase de Ferdinand Foch, el término hombres, lo entiendo como personas. Aunque la frase diga hombres no tendría ningún sentido, sería absurdo, no entender a las mujeres incluidas dentro de la misma, ya que son capaces de las mimas acciones.

Cuando pensamos en alguien culto, que una persona es culta, parece que es un hecho, que es así por su naturaleza, como si hubiera nacido culto o culta de la misma forma que tiene dos brazos, dos piernas, una cabeza, una nariz o dos ojos.

No, ser culto no es un hecho, llegar a ser y mantenerse culto es la realidad, cultivarse es el hecho.

Cultivarse tiene el sentido de que te preparas y lo haces cada día. Que entiendes que en cuanto te detengas empiezas a perder esa preparación, por eso no es un estado alcanzado en el nacimiento, sin esfuerzo, sin sacrificio, es un estado que se alcanza y se mantiene día a día, leyendo, asistiendo a cursos, compartiendo con otros:

Y tú, ¿te cultivas?