Puntos Función y CMMI (I)

Dentro del proceso de mejora continua de las empresas, la implantación de la metodología de Puntos Función IFPUG, complementa al modelo CMMI para obtener niveles más altos y más consolidados de madurez.

Dentro de esta serie de artículos que vamos a publicar, comenzamos por Planificación de Proyectos que es un área de proceso de gestión de proyectos en el nivel de madurez 2 bajo el modelo CMMI.

 “The purpose of Project Planning (PP) is to establish and maintain plans that define project activities” (CMMI® for Development, Version 1.3)

El objetivo de la metodología de Puntos Función es medir la funcionalidad implementada a través de los proyectos de desarrollo, mejora o mantenimiento del Software. Su objetivo no es realizar un plan de proyecto ni mantenerlo, de acuerdo a las directrices marcadas por CMMI. Pero la valoración de un proyecto a través de la metodología de Puntos Función sí puede ser utilizada por los jefes de proyecto para estimar esfuerzos y costes de todas las actividades de desarrollo de Software, desde las fases tempranas del ciclo de vida, con un margen de desviación aceptable (dos personas certificadas CFPS, bajo unos requisitos de Software identificados y bien definidos, tienen un margen de desviación en sus valoraciones inferior al 5%).

La tarea de estimar o medir esfuerzos se puede realizar a través de muchas técnicas, y con la ayuda de numerosas herramientas, pero la metodología de Puntos Función nos ayuda a establecer las estimaciones a partir del valor del tamaño del desarrollo Software y el valor de la productividad, obteniendo el resultado de esfuerzo del proyecto en unidad de tiempo. (Specific Goal SG 1 Establish Estimates)

El primer paso del proceso de medición definido por IFPUG es reunir la documentación disponible que describa la funcionalidad desarrollada. Los requisitos funcionales de usuario son clasificados de acuerdo a la metodología de Puntos Función en “Componentes Funcionales Básicos (BFC)”. Por lo tanto, los jefes de proyecto pueden utilizar la valoración en Puntos Función de un proyecto para identificar las funcionalidades que no estaban especificadas en los requisitos iniciales y de este modo controlar el alcance del proyecto.

Por otro lado, la utilización de los BFC es de gran ayuda para establecer la estructura de desglose de trabajo (EDT) del proyecto. De esta manera conseguimos identificar los paquetes de trabajo y así podemos desarrollar nuestro plan de proyecto (Specific Goal  SG 2 Develop a Project Plan).

Una medición del tamaño funcional se realiza utilizando la información en un lenguaje común al usuario y a los desarrolladores. Esta característica de los Puntos Función facilita la integración de todos los participantes en el desarrollo del producto. De este modo los analistas son capaces de comprender los requisitos que tienen que elaborar, los desarrolladores los elementos que tienen que programar y los tester los casos de prueba que deben validar. La integración de todos estos elementos facilita el compromiso de todas las partes con el plan (Specific Goal SG 3 Obtain Commitment to the Plan).