Hablamos muchas veces de mirar más allá, de ver de otra forma, de forma diferente, de tornar nuestros ojos y ser capaces de profundizar y detectar detalles allí donde antes solo había tedio y regularidad. Hoy te traigo una forma, inesperada, de ver más allá de un objeto al que estamos muy acostumbrados: los libros. No me resisto a que lo veas con tus propios ojos.
Los libros sirven para leer, todos lo tenemos claro, pero ¿pueden ocultar algo más?
La verdad es que sí y no solo de forma figurada o a través de palabras, sino que de una forma mucho más artística, ya que esconden imágenes reales.
Es una práctica que data del siglo X, no es algo nuevo, pero que los libros electrónicos no pueden tener.
Una lástima. Con estas pinturas escondidas a solo un golpe de dedo, los libros elevan su categoría a una obra de arte completa.
Nos recuerdan así que miremos más allá de lo que vemos normalmente, que aportar valor, que aportar un sello de distinción, de diferencia no es tan complejo ni tan extraño, solo está a unos centímetros de nuestra mano.
Sin desvelarte más te dejo que lo descubras con curiosidad en el vídeo del viernes de hoy.
¡Feliz Viernes!
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