Cómo protegerte del Riesgo de Perderlo todo

No nos gustan los riesgos, intentamos mitigarlos, planes de respuesta al riesgo, planes de mitigación de la probabilidad de aparición, pero… ¿y si te equivocas de riesgos? Tu proyecto se va al ….

Los conoces de sobra y si no te los recuerdo a continuación un riesgo se compone de 4 elementos principales:

• Evento. Suceso que hace que el riesgo se materialice.
• Probabilidad. Grado de certeza de que el evento sucederá.
• Impacto. Grado de afección del riesgo en el proyecto.
• Valor. Dato calculado, generalmente, en función de la probabilidad y el impacto para priorizar los riegos.

Con esto en mente nos centramos en riesgos claros y comunes. Esos riesgos que digamos nos gusta mitigar o que tenemos la tranquilidad de haber tratado en otras ocasiones y, por tanto, nos sentimos cómodos con ellos. Pero hay otros riesgos, riesgos ocultos a nuestra mirada dispuestos a caer encima nuestro. Riesgos a los que nosotros no prestamos atención aunque están ahí.

Probablemente pienses que me refiero a un cisne negro, a esos eventos infrecuentes descritos por Nassim Taleb cuyo impacto causa un drástico cambio a nuestro proyecto o nuestras vidas. A modo de símil se representa siempre el caso del pavo sacrificado en acción de gracias en Estados Unidos, donde el animal no puede sospechar su fin, ya que hasta el día antes de su sacrificio está sobrealimentado y con una existencia feliz.

Por eso, te equivocabas en tu suposición.

Un cisne negro por el hecho de serlo es impredecible. Si sucede, el peso de su impacto cae sobre nosotros sin más. No hay nada que puedas hacer… como si los caminantes blancos cayeran sobre tí.

Los riesgos a los que me refiero son otros…

Nos focalizamos en controlar riesgos cuya probabilidad de suceder no es tan clara, cuando en cambio otros mucho más probables y más fáciles de detectar no hacemos nada para corregir su impacto.

Hoy en día los datos dominan nuestro mundo: correos, documentos, hojas de cálculo, archivos, vídeos, audios, etc. todos son necesarios para nuestro día a día, para nuestro proyecto. Es en nuestro proyecto donde forman parte de la línea vital que lo hace funcionar, pero… ¿tomamos medidas para asegurarlos?

Algunas compañías utilizan una cloud, un servicio tipo dropbox, Google Drive o Microsoft Onedrive donde por un determinado precio al mes podemos subir hasta un límite de Gigas la información de nuestros proyectos. Podemos subirla y compartirla entre los miembros del equipo. Dirás incluso que no tienes que pagar nada al mes, que algunos de ellos son gratis. No hay nada gratis, cuando no pagas por un servicio el pago eres tú, tus datos, pero hay otra solución…

Cuando nos resistimos a utilizar estos servicios para almacenar nuestra información o no tenemos definida una política correcta para utilizarlos pueden llegar los problemas. Problemas en forma de pérdida de datos, discos duros que por error se borran, se van al traste. Ese momento donde un sudor frío recorre nuestra espalda, una gota de la escarcha más gélida proveniente del norte del muro bajando nuestra sien… ¿el producto de todo nuestro proyecto perdido? ¿y ahora qué?

Para ello sólo te queda un plan de respuesta, porque el riesgo sucedió, la probabilidad se cumplió y tenemos que minimizar el impacto. Utilizar un software como EaseUS para recuperar los datos perdidos de correos, hojas excel, fotos, vídeos o todo el material que sea necesario para el proyecto.

Aunque para la próxima vez podrías utilizar este software para realizar una copia de seguridad y dormir más tranquilo. Recuerda que minimizar la probabilidad del evento que dispara un riesgo es el primer paso para mitigarlo. El segundo reducir el impacto en nuestro proyecto.

Los riesgos de tus proyectos suceden, creas en ellos o no.

¡Protégete!