Tú no quieres Agilidad, quieres proyectos predictivos cortos ¡y lo sabes!

La Agilidad está de moda, una moda de unos cuantos años, y tú, cómo todos los demás, quieres ser Ágil ¿a alguien no le gusta como suena esa palabra? Por eso, en tu licitación, en tu RFP, en tu petición de oferta pones que los desarrolladores del proveedor deben estar certificados en Scrum, deben ser ágiles, deben ser la leche, pero luego vas en tu proyecto y pides…

Llega tu licitación y exiges, además de personal certificado en Scrum, un Alcance, unos hitos y un precio cerrado para tu proyecto. En ese momento los proveedores que la leen te miran y te dicen ¿estás de broma?

Claro tu vas y les comentas que siempre se ha hecho así, que eres una empresa pública, que tienes un auditor y claro, las cosas hay que hacerlas de ese modo.

Como el desarrollo de software es un negocio, todo el mundo te dice que está de acuerdo, y es aquí cuando comienzan a llegar los problemas.

Luego dices que eso del Product Owner qué es lo que es. Te dicen que es el que tiene que decir lo que hay que hacer. Respondes que ya le pagas al equipo de desarrollo para que sean ellos los que analicen y definan los requisitos en un nivel de detalle suficiente. ¿Cómo va a ser eso de que pagando yo soy quien te tiene que decir lo que hay que hacer? Entonces, me hareis un descuento que os estoy haciendo el trabajo, ¿no?

Claro les estás haciendo el trabajo porque lo que tu entiendes por Agilidad no es Agilidad es otra cosa. Lo que tu le exiges a tus proveedores, certificación de Scrum, no te lo exiges a tí mismo, no inviertes un tiempo en estudiar un poco más a fondo de que va esto del Scrum y cómo se debe aplicar dentro de una organización.

Tú solo ves una moda y te lanzas de cabeza dentro de ella, pero…

Lo primero que deberías hacer no es leerte un par de artículos de las firmas de referencia en Scrum o en la Agilidad. Quizás sería mejor que te leyeras algún libro de alto nivel sobre Scrum para que aprendas sobre la cultura que debes adoptar, y digo bien, adoptar, porque uno de los primeros cambios es el cambio cultural, uno de los primeros o casi que el único cambio importante. Si no estás dispuesto a hacerlo, si no estás dispuesto a cambiar la cultura de tu empresa o no es posible porque es una organización pública, no merece la pena que sigas adelante.

El primer paso que deberías hacer es tomar un curso que te permita interiorizar los valores reales que hacen funcionar Scrum y que hacen funcionar la agilidad: Respeto, Confianza, entrega de Valor, Mejora contínua, Experimientación, Adaptación, Liderazgo de Servicio, etc.

Interiorizar estas cuestiones es lo que marca la diferencia entre que la Agilidad funcione o no. ¿De qué sirve decir que quieres ser ágil sin confiar en que el equipo de desarrollo trabajará para hacer lo correcto? Sí, para lo que estás pensando ya decía Ronald Regan: “Confía, pero Verifica” y como puedes ver se comienza confianzado.

Segundo si ves que no es posible cambiar culturalmente y que te va a ser imposible tratar a tus proveedores con confianza (sobre todo, suele existir este problema cuando los equipos son externos a la organización) da un paso más radical y quédate con tus modelos predictivos de antes.

Te lo digo en serio, toma tu modelo predictivo y sigue con él. Eso sí, cámbiale algunas cosillas como estas…

Una de las mayores causas de éxito en un proyecto es su tamaño. El tamaño importa y cuanto más pequeño es un proyecto, mayor es la probabilidad de éxito que tendrá. Eso que se suele hacer de, “poya que hacemos este proyecto añádele esto que es poquito, y esto otro también, y esto que no es ná”.

¡Qué no!

¡qué no!

¡qué no! que lo que estás haciendo es condenar tu proyecto al desastre.

Establece un proyecto predictivo que dure como mucho 3 meses y que cada mes se presente una demo de lo que se lleva construido. ¿Qué si se puede hacer esto? Claro que se puede hacer ¿por qué no?

Con esto consigues dominar el tamaño para asegurarte un mayor éxito y tener feedback temprano de lo que se está construyendo que es una de las cosas por las que la mayoría de las empresas desean abrazar la agilidad. Los requisitos seguirán siendo predictivos, el equipo tendrá que analizarlas, completarlos, etc., pero tu verás el resultado más temprano.

Si no cambias la cultura de tu compañía, de tu empresa, abrazar la agilidad sólo será una cuestión de palabra que te podrá condenar al fracaso, ya que por mucho que digas que eres ágil no lo serás.

Aprovecha mejor las cosas que conoces y dominas, siempre que tu entorno no sea complejo, y facilitar la zona donde esas herramientas que usas funcionan mejor te acercará más al éxito.

Be water, my friend!